Tasaciones de viviendas se disparan por búsqueda de recursos para tener casas más amplias por teletrabajo

Otros quieren establecer un precio de venta de la propiedad para generar liquidez por crisis

En el primer trimestre de este año se registró un alza de 30% en este tipo de evaluación de activos inmobiliarios, según análisis de Colliers.

La crisis sanitaria por el covid-19 también ha impactado en el mercado de las propiedades. Algunos sienten la necesidad de cambiarse a una vivienda más amplia y confortable por las exigencias del teletrabajo –que en varios casos se extenderá pos-pandemia– o la educación a distancia. Otros, golpeados por la caída de la economía, deben vender su casa o departamento para generar liquidez, achicar su morada o convertirse en arrendatario.

Ese es el análisis que realiza la firma de asesoría inmobiliaria Colliers International a raíz del fuerte crecimiento de las tasaciones de propiedades en los primeros meses del año en el país. Según un estudio que efectuó, las evaluaciones de precios de activos inmobiliarios se dispararon 30% anual en el primer trimestre de 2021, principalmente de casas y departamentos –llegando al 80% de los casos en febrero–, seguidos por oficinas, industriales y terrenos.

Fabiola Barna, gerente de Tasaciones Bancarias de Colliers, comenta que “el aumento de tasaciones se ha debido a un sostenido dinamismo en el mercado inmobiliario. Hoy existen buenas oportunidades de inversión, con aún buenas tasas para los créditos hipotecarios de la banca general y, por otro lado, se ha generado una nueva búsqueda de espacios, ya que la vivienda dejó de ser solo eso y ahora pasó a ser también oficina o sala de clases. Estos dos nuevos usos, dados inicialmente por la pandemia y cuarentenas, llegaron para instalarse”.

Barna añade que “hay rubros profesionales que ya no volverán a las oficinas, como por ejemplo, los que tienen que ver con el área de la tecnología, entre otros. Por lo tanto, las necesidades de espacios en una casa han cambiado, se requieren más lugares tanto de esparcimiento como para trabajos o estudios, por lo tanto, mucha gente ha decidido cambiar su actual vivienda por una que acoja las nuevas necesidades”.

Añade que en esas decisiones también han incidido la mayor liquidez derivada de los retiros del 10% de las AFP, con los que “se ha logrado tener un aporte para el pie o parte del valor de la nueva vivienda, lo cual ha incrementado y mantenido el dinamismo inmobiliario”.

Pero Barna advierte que “debido a la pandemia hay un porcentaje no menor de personas que requieren de liquidez y necesitan vender sus propiedades, ya sea para comparar una vivienda más económica o para arrendar. Esto ante la imposibilidad o dificultad de pagar el dividendo”.

De todos modos, señala que la mayor solicitud de tasaciones es para obtener financiamiento para la compra de una vivienda, nueva o usada. Asimismo, ha tomada fuerza la evaluación de terrenos o parcelas de agrado en zonas rurales, indica.

Si bien el crecimiento de las tasaciones del primer trimestre fue de cerca de 30%, en febrero hubo comunas que registraron alzas superiores al 80% respecto de enero, como ocurrió en el caso de San Joaquín y Macul. Esa alza es “inusual” para esa época, agregan en Colliers. En igual lapso, las tasaciones en Lo Barnechea subieron 56%, mientras que en San Miguel 44%.

Las características de las propiedades que las personas están tasando son muy variadas, con superficies que van desde los 50 m2 hasta sobre los 500 m2 útiles.

¿Impacto en precios?

Carla Tapia, gerenta de Estudios Inmobiliarios de Montalva Quindos, comenta que al realizar “una observación general, podríamos señalar que no se ha visto un aumento considerable en los precios de venta de propiedades, sino que se han mantenido estables. Los arriendos, en tanto, presentan un fenómeno distinto, ya que dependiendo de las comunas y tipologías, se puede ver tanto un incremento o baja”.

COMUNAS

San Joaquín, Macul y Lo Barnechea son las comunas que han registrado fuertes alzas en cotizaciones este año.